
El solsticio del verano, tiene lugar aproximadamente entre el 21 y 22 de junio, es el día más largo del año, donde la luz y la vida son abundantes y el sol alcanza el momento de máxima fuerza y poder.
En la cultura celta, era homenajeado como símbolo de vida y purificación con múltiples hogueras, buscando la bendición para las tierras y sus frutos.
Se complementa con baños en el río o en el mar, como símbolo de purificación y saltar por encima de la hoguera o girar entorno a ella, tres veces, en sentido contrario a las agujas del reloj, para transmutar; ya que es una celebración de purificación, prosperidad, abundancia y fecundidad.
Se cuenta que al amanecer se iba a coger de las fuentes y los manantiales la Flor Celeste o Flor de Agua, entonando cantos dedicados al rocío; para beberla, limpiarse la cara con ella y preparar remedios mágicos.
Se dice que en esta noche es sumamente sencillo comunicarse con las hadas y los espíritus de la naturaleza y es concedido lo que pidamos, siendo lo mejor para nosotros y para todos los seres.
¡¡¡Feliz Solsticio de Verano!!!
Que la magia inunde tus ojos
y puedan ver la belleza
del corazón de la Tierra
palpitando en la exhuberancia.